En 1978 a la muerte Pablo VI es
elegido nuevo Papa el Cardenal Albino Luciani de 65 años quien tomó el nombre
de Juan Pablo I. El nuevo Papa fallece 33 días después de su nombramiento y el 15 de octubre de 1978
Karol Wojtyla es elegido como el sucesor de San Pedro, rompiendo con la
tradición de más de 400 años de Papas de origen italiano y el primer Papa
polaco.
Fue elegido pontífice el 16 de octubre de 1978
y escogió el mismo nombre que había tomado su predecesor: Juan Pablo. Y pasó a ser conocido como Juan Pablo II.
El Papa estuvo en el cargo más de 26
años y 5 meses, siendo el suyo el tercer pontificado más largo en los más de
2.000 años de historia de la Iglesia Católica Romana.
El pontificado de Juan Pablo II
pasará a la historia como el de mayor impacto social y político en toda la
historia. En sus primeros años, Karol Wojtila consumó el proceso de deshielo en
las relaciones entre la Iglesia católica y los regímenes comunistas.
Durante sus años de pontificado
siguió rompiendo esquemas, tanto en su apuesta por la nueva evangelización en
los países liberados del comunismo como en otros ámbitos sociales, sin excluir
sus numerosos viajes a los cinco continentes, concretamente a países en muchos
casos alejados del catolicismo.
Ha sido especialmente importante su
trabajo de potenciación del diálogo interreligioso en varios ámbitos. En
septiembre de 1986, se reunió en Asís (Italia) con líderes de las principales
religiones monoteístas en un histórico encuentro que ha dado nombre a lo que se
conoce como todo un espíritu ligado a la ciudad de San Francisco.
Juan Pablo II es, además, el primer pontífice
que ha pisado una mezquita y que ha visitado países ortodoxos, algo impensable
antes de 1978. En 26 años, el trabajo del Santo Padre ha cambiado el mundo.
Entre las cosas más importantes que
hizo el Papa Juan Pablo fueron:
· Recuperó la devoción a la Virgen. Este Papa consiguió que la gente
volviese a creer en la Virgen, que por aquella época les parecía una situación embarazosa.
· Volvió a colocar la evangelización en el centro de la vida
de la Iglesia. Si hay una idea fundamental del pontificado de Juan Pablo II es
la de la Nueva Evangelización, que se refleja en encíclicas como Redemptoris
Missio o Redemptor Hominis.
· El Catecismo de la Iglesia Católica. Es un método incomparable
para la enseñanza de la fe. En la misma línea, fue muy importante la
publicación del nuevo Código de Derecho Canónico.
· Juan Pablo II hizo todo lo posible por conseguir un mayor
acercamiento con la Iglesia Ortodoxa en países orientales.
· Una poderosa doctrina social, en sus encíclicas y
documentos. Consiguió exponer al mundo no sólo los errores del comunismo, sino
también las limitaciones del capitalismo. A juicio de muchos estudiosos, Juan
Pablo II tuvo un importante rol en la caída de los regímenes comunistas.
· Nombró al cardenal Ratzinger para la Congregación para la
Doctrina de la Fe. Este cardenal pasaría a ser su sucesor.
· Florecimiento de los nuevos movimientos, que han plasmado
en la práctica nuevas formas de vivir la vocación universal a la santidad de la
que habló el Concilio Vaticano II.
· Jornadas Mundiales de la Juventud, que consiguieron que numerosas
personas se dedicarán a la vocación religiosa.
El 13 de mayo de 1981 en la plaza vaticana, el turco Ali Agca
le disparó varias veces que estuvieron a punto de matarle. Juan Pablo II
siempre dijo que se salvó por la intervención de la Virgen porque ese día se
celebraba la Virgen de Fátima. Según el Pontífice una mano disparó -la del
turco- y otra, la de Virgen, desvió el tiro que le rozó partes vitales, sin
dañarlas. Fue trasladado al policlínico romano 'Agostino Gemelli', donde fue
intervenido quirúrgicamente y le extirparon 55 centímetros de intestino.
El 20 de junio de 1981, 17 días después de haber sido dado de
alta, volvió al 'Gemelli' para ser tratado de una infección de cytomegalovirus,
derivada de la operación.
El 12 de julio de 1992
fue intervenido de un tumor en el colon en el 'Gemelli'. La operación duró
cuatro horas y le fue extraído un tumor benigno del tamaño de una naranja. A la
vez le fue extirpada la vesícula biliar y detectados cálculos biliares.
El 11 de noviembre de 1993, durante una audiencia, cayó y se
produjo una luxación del hombro derecho con fractura de la glena y fue operado en el Gemelli.
En 1994 se fracturó el
fémur de la pierna derecha al resbalar cuando salía de la bañera de su
apartamento privado del Vaticano. Por quinta vez volvió al hospital, donde se
le implantó una prótesis de titanio, lo que le obligó a caminar durante varios
meses apoyándose en un bastón.
En el mes de marzo de
1996 un trastorno digestivo le obligó a guardar reposo durante una semana. En
menos de tres meses padeció otros dos trastornos intestinales.
El 8 de octubre de
1996 volvió a ser ingresado en el 'Gemelli' para ser intervenido de apendicitis
previa a la eliminación de adherencias loco-regionales.
En junio de 1999
durante su octavo viaje a Polonia cayó en la Nunciatura de Varsovia, abriéndose
una herida en la frente que obligó a aplicarle tres puntos de sutura.
En marzo del 2002 se
le diagnosticó una artrosis en la rodilla derecha, que le obligó a renunciar a
presidir algunos ritos de la Semana Santa y no pudo realizar a pie el Vía
Crucis a lo largo del Coliseo de Roma. De todas formas, tomó la cruz en las dos
últimas estaciones. Hasta mediados de octubre de 2003, cuando celebró los 25
años de pontificado leía el principio y final de los discursos, pero a partir
de esa fecha -cuando beatificó a la madre Teresa de Calcuta y celebró su noveno
consistorio- ya no leyó párrafo alguno de los textos.
Juan Pablo II fue sometido a una traqueotomía el 24 de
febrero de 2005. Volvió a sus estancias en el Vaticano el 13 de marzo, pero su
estado de salud se deterioró y apareció muy fatigado en los actos de Semana
Santa, donde apenas pudo pronunciar unas palabras a los fieles. La última
aparición pública de Juan Pablo II fue el 30 de marzo de 2005, cuando se asomó
a la ventana de sus aposentos para bendecir a los fieles.
Aquel día las personas que se congregaban en la Plaza de San
Pedro de Roma pudieron ver al Papa muy mal. Intentó hablar, pero no lo
consiguió. En la tarde del 31 de marzo de 2005, le fue diagnosticada una
infección en las vías urinarias, tras lo cual tuvo lugar "un choque
séptico con colapso cardiocirculatorio". A pesar de la gravedad de la
situación, Juan Pablo II pidió no ser trasladado hasta el hospital Gemelli y permanecer
en sus aposentos del Vaticano.
Murió a las 21:37 hora local del 2 de abril de 2005. La causa
del fallecimiento fue un 'shock' séptico y un colapso cardiocirculatorio
irreversible. Poco antes de morir, alzó
la mano derecha y esbozó un gesto de bendición mirando hacia la ventana de la
plaza. Instantes después dijo "amén" y expiró.
Los funerales por el alma de Juan Pablo II comenzaron a las
diez de la mañana. Antes, el arzobispo y secretario personal del Papa, Mons.
Stanislaw Dziwisz, siguiendo la costumbre, cubrió el rostro del pontífice con
un velo blanco de seda, antes de salir en procesión hacia la plaza de San
Pedro. Se habían colocado dentro del ataúd, en una pequeña bolsa, con las
monedas acuñadas a lo largo de su pontificado. El maestro de ceremonias leyó el
texto de pergamino con una pequeña semblanza del Papa, que se introdujo en el
rogito, un pequeño cilindro de plomo, que se colocó junto al cuerpo yacente.
La plaza de san pedro estaba llena de personas entre los que
se encontraban miles de polacos. Entre la muchedumbre -que más que a rezar por
el alma del Papa santo, iban pedirle gracias y favores- se alzaban banderas de
los países más diversos y algunas pancartas que decían: "Santo
Subito", que significa: "Que se proclame al Papa santo
inmediatamente", ¡Que lo proclamen santo, ya!
Acudieron numerosos representantes de la ortodoxia y de otros
credos y religiones, también acudieron varios presidentes.
Entre el repicar de las campanas, los silleros, vestidos de
chaqué, trasladaron el ataúd por la Puerta de Santa Marta que da al exterior de
la basílica para entrar por la puerta del "Brazo Braschi" que conduce
directamente a la Cripta de la Basílica.
El ataúd fue precintado con cintas rojas, selladas con los
sellos de la Cámara Apostólica, de la Prefectura de la Casa Pontificia, de la
Oficina de celebraciones litúrgicas del Papa y del Capítulo Vaticano.
Siguiendo la tradición, introdujeron el ataúd de madera de
ciprés y de olmo en un féretro de plomo de 4 centímetros de espesor, para
evitar la humedad. Luego, éste fue introducido en otro féretro, de madera de
nogal.
La sepultura fue cubierta con una lápida sencilla, de mármol
blanco, con una cruz y la inscripción: Johannes Paulus P. P. II.
No hay comentarios:
Publicar un comentario